Ante la huelga de hambre anunciada por los internos en la cárcel de Olmos, la Defensoría del Pueblo bonaerense se hizo presente en esa unidad penal con el objetivo de que se garantice la alimentación y la condición de salud de los detenidos.
El secretario de Promoción de Derechos Humanos, Luis Rech, y la directora de Desarrollo Social de la Defensoría, Alejandra López, recorrieron la unidad y mantuvieron diálogo con autoridades e internos para conocer de primera mano la situación que se vive en el penal.
Antes, el Defensor del Pueblo bonaerense, Guido Lorenzino, había cuestionado el estado en el que se encuentran los y las detenidas en las cárceles de la Provincia. “Es alarmante”, aseguró, y consideró que “es necesario que el gobierno garantice los derechos de las personas detenidas de acuerdo a las normas constitucionales y los tratados internacionales hasta el último día de su gestión”.
La Defensoría ya había presentado un habeas corpus debido a la situación de las unidades carcelarias y de los institutos de detención de menores. En ese sentido, Lorenzino confirmó que el organismo continuará con las inspecciones en los distintos establecimientos carcelarios de la Provincia para monitorear las condiciones en que se encuentran.