"Las señales de violencia de género no son suficientemente escuchadas", sostuvo el Defensor del Pueblo de la provincia de Buenos Aires, Carlos Bonicatto, en una jornada en La Matanza sobre esta problemática. El encuentro, organizado por la Defensora del Pueblo matancera, Silvia Caprino, apuntó a generar un debate sobre la violencia contra
"Las señales de violencia de género no son suficientemente escuchadas", sostuvo el Defensor del Pueblo de la provincia de Buenos Aires, Carlos Bonicatto, en una jornada en La Matanza sobre esta problemática.
El encuentro, organizado por la Defensora del Pueblo matancera, Silvia Caprino, apuntó a generar un debate sobre la violencia contra las mujeres, en el marco de las actividades que tienen lugar en la "Plaza del Encuentro", una iniciativa de la Dirección de Políticas de Género de ese Municipio.
Bonicatto indicó que "la Defensoría debe proteger a las mujeres en la conquista de las libertades que antes se le negaban”, a la vez que reconoció a la pobreza como “el gran problema que agrava estas situaciones".
Señalando que deben atenderse específicamente los casos de violencia obstetricia y la situación de las mujeres en las cárceles, el Defensor provincial subrayó que "muchas de las reivindicaciones de los derechos de la sociedad, se ha logrado gracias al impulso de las mujeres".
"Debemos luchar contra una estructura cultural basada en el sometimiento de la mujer, y la solución la encontraremos entre todos mediante la transversalidad", destacó, y se refirió a las políticas públicas sobre este tema como “insuficientes, por lo que hay que analizar en la práctica qué es lo que falta”.
La mesa, que también contó con la presencia de la coordinadora de la Red de Mujeres de la Federación Iberoamericana del Ombudsman (Fio), Gabriela Moffson, sirvió para que los distintos grupos presentes expongan sus experiencias sobre esta temática.
El encuentro, organizado por la Defensora del Pueblo matancera, Silvia Caprino, apuntó a generar un debate sobre la violencia contra las mujeres, en el marco de las actividades que tienen lugar en la "Plaza del Encuentro", una iniciativa de la Dirección de Políticas de Género de ese Municipio.
Bonicatto indicó que "la Defensoría debe proteger a las mujeres en la conquista de las libertades que antes se le negaban”, a la vez que reconoció a la pobreza como “el gran problema que agrava estas situaciones".
Señalando que deben atenderse específicamente los casos de violencia obstetricia y la situación de las mujeres en las cárceles, el Defensor provincial subrayó que "muchas de las reivindicaciones de los derechos de la sociedad, se ha logrado gracias al impulso de las mujeres".
"Debemos luchar contra una estructura cultural basada en el sometimiento de la mujer, y la solución la encontraremos entre todos mediante la transversalidad", destacó, y se refirió a las políticas públicas sobre este tema como “insuficientes, por lo que hay que analizar en la práctica qué es lo que falta”.
La mesa, que también contó con la presencia de la coordinadora de la Red de Mujeres de la Federación Iberoamericana del Ombudsman (Fio), Gabriela Moffson, sirvió para que los distintos grupos presentes expongan sus experiencias sobre esta temática.