En ocasión de la conmemoración del Día de los Derechos de Niños y Adolescentes, el Defensor Del Pueblo Adjunto General de la Provincia, Walter Martello, visitó el hogar Ángel Azul de La Plata
En ocasión de la conmemoración del Día de los Derechos de Niños y Adolescentes, el Defensor Del Pueblo Adjunto General de la Provincia, Walter Martello, visitó el hogar Ángel Azul de La Plata donde compartió con los chicos la presentación de “Cuentos del Sapo”, de Teresita Bustos.
“Celebramos los derechos de los niños en este día y velamos por la garantía de cumplimiento de los mismos. El ser respetado significa ser oído, no discriminado, y que se tenga derecho a la vida y el desarrollo, y la consideración primordial de su interés superior”, indicó Martello.
En esa línea, expresó que “sostenemos que es fundamental dar voz a los niños, ya que esta consigna se traduce en la ponderación de los nuevos paradigmas y en el desafío para quienes trabajamos con ellos en un contexto, como el actual, donde la exclusión registra niveles preocupantes hace más de una década".
“Es en este escenario adverso que tenemos que velar por los que se encuentran más vulnerables ante la violencia, la exclusión y la violación de derechos. Por ello, reiteramos el pedido de designación del Defensor de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescencia a nivel nacional que será una conquista en la protección de derechos humanos, además nos permitirá arribar a un diagnóstico de la situación de la niñez y la adolescencia a nivel federal, y se traducirá en una instancia superadora y de articulación institucional en la labor cotidiana”, agregó Martello.
El Día de los Derechos de niños y adolescentes se celebra en conmemoración a la fecha en que nuestro país sancionó la Ley N° 23.849 que puso en vigencia la Convención sobre los Derechos del Niño, sentando las bases de un sistema de promoción y protección integral de la niñez y la adolescencia.
“Este fue un cambio de paradigma que pasó de un sistema de patronato a un modelo que enfatiza en el reconocimiento de los niños como sujetos plenos de derechos y garantías, mediante la consolidación de sus cuatro principios generales: el derecho a ser oído, a la no discriminación, a la vida y el desarrollo, y la consideración primordial del interés superior del niño”, concluyó el Defensor Adjunto.
“Celebramos los derechos de los niños en este día y velamos por la garantía de cumplimiento de los mismos. El ser respetado significa ser oído, no discriminado, y que se tenga derecho a la vida y el desarrollo, y la consideración primordial de su interés superior”, indicó Martello.
En esa línea, expresó que “sostenemos que es fundamental dar voz a los niños, ya que esta consigna se traduce en la ponderación de los nuevos paradigmas y en el desafío para quienes trabajamos con ellos en un contexto, como el actual, donde la exclusión registra niveles preocupantes hace más de una década".
“Es en este escenario adverso que tenemos que velar por los que se encuentran más vulnerables ante la violencia, la exclusión y la violación de derechos. Por ello, reiteramos el pedido de designación del Defensor de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescencia a nivel nacional que será una conquista en la protección de derechos humanos, además nos permitirá arribar a un diagnóstico de la situación de la niñez y la adolescencia a nivel federal, y se traducirá en una instancia superadora y de articulación institucional en la labor cotidiana”, agregó Martello.
El Día de los Derechos de niños y adolescentes se celebra en conmemoración a la fecha en que nuestro país sancionó la Ley N° 23.849 que puso en vigencia la Convención sobre los Derechos del Niño, sentando las bases de un sistema de promoción y protección integral de la niñez y la adolescencia.
“Este fue un cambio de paradigma que pasó de un sistema de patronato a un modelo que enfatiza en el reconocimiento de los niños como sujetos plenos de derechos y garantías, mediante la consolidación de sus cuatro principios generales: el derecho a ser oído, a la no discriminación, a la vida y el desarrollo, y la consideración primordial del interés superior del niño”, concluyó el Defensor Adjunto.