"La resolución pacífica de los conflictos se debe encarar teniendo en cuenta las relaciones de poder, la cultura y la identidad de los actores involucrados", dijo Alejandro Nató en la apertura de la capacitación sobre "Mediación, transformación pacífica de conflictos", que comenzó a dictar para el personal de la Defensoría del Pueblo
"La resolución pacífica de los conflictos se debe encarar teniendo en cuenta las relaciones de poder, la cultura y la identidad de los actores involucrados", dijo Alejandro Nató en la apertura de la capacitación sobre "Mediación, transformación pacífica de conflictos", que comenzó a dictar para el personal de la Defensoría del Pueblo de la provincia de Buenos Aires.
Durante el encuentro, Nató desarrolló conceptos vinculados a la conflictividad, a la relación de los gobiernos con los medios de comunicación, a los actores sociales emergentes y a la manera de encarar los problemas por parte del Estado. "La cultura estatal es la de intentar sacarse el conflicto de encima porque quema. El Estado aborda el problema desde la imposición del poder; el consenso y el diálogo se relaciona a la debilidad política", sostuvo Nató.
"Los que trabajamos en la resolución pacífica de los conflictos intentamos evitar la violencia pero no evitar el conflicto. No hay que trabajar sólo con lo que vemos, para resolver situaciones conflictivas, hay que meter las manos en la tierra, ir a las raíces del problema", explicó el experto en mediación.
Sobre la tarea de la Defensoría, Nató sostuvo que "nuestra misión es abordar los conflictos antes que lleguen a la instancia de crisis, en un sistema de alerta temprana, escuchar a los actores y plantear soluciones integrales y pacíficas".
En la capacitación estuvieron presentes el Defensor Carlos Bonicatto y los secretarios Carlos Martiarena, Guillermo Gentile y Néstor Piscioneri.
Durante el encuentro, Nató desarrolló conceptos vinculados a la conflictividad, a la relación de los gobiernos con los medios de comunicación, a los actores sociales emergentes y a la manera de encarar los problemas por parte del Estado. "La cultura estatal es la de intentar sacarse el conflicto de encima porque quema. El Estado aborda el problema desde la imposición del poder; el consenso y el diálogo se relaciona a la debilidad política", sostuvo Nató.
"Los que trabajamos en la resolución pacífica de los conflictos intentamos evitar la violencia pero no evitar el conflicto. No hay que trabajar sólo con lo que vemos, para resolver situaciones conflictivas, hay que meter las manos en la tierra, ir a las raíces del problema", explicó el experto en mediación.
Sobre la tarea de la Defensoría, Nató sostuvo que "nuestra misión es abordar los conflictos antes que lleguen a la instancia de crisis, en un sistema de alerta temprana, escuchar a los actores y plantear soluciones integrales y pacíficas".
En la capacitación estuvieron presentes el Defensor Carlos Bonicatto y los secretarios Carlos Martiarena, Guillermo Gentile y Néstor Piscioneri.